La Premonición
Fandom:La Premonición
Claim: AnnexLuke
Título: Visita
Palabras: 705
Advertencias: Ninguna

Me miraba con los ojos desorbitados por la sorpresa; al parecer no esperaba mi visita. ¿O quizás había llegado en un mal momento y había interrumpido algo?
Me molestó pensar en esto. Él no debía estar con nadie... no podía estarlo. Él era mío, solo mío, y yo no iba a compartirlo con nadie.

—Pasa— me dijo después de un rato, mientras se hacia a un lado para dejarme entrar a su pequeña pero siempre acogedora casa.

Sabia que la compartía con Cecil pero como nunca lo vi en este lugar (se pasaba la mayor parte del tiempo conmigo en la casa de Edna) no lo consideraba propietario del inmueble. Cuando entré, me quedé mirando hacia todos lados tratando de encontrar algún cambio pero no, todo estaba igual a la última vez que estuve aquí. Me gustó esto porque me hacia sentir como si nada hubiese cambiado, que todo seguía siendo igual que antes a pesar de que no era cierto. Ya nada era ni seria igual.

En primer lugar yo ya no era la misma de antes y el cambio, por lo que puedo ver a través de los horrorizados ojos de Luke, no le gustó. Segundo, ya no era una terrana lo cual era una de las cosas que mas lo espantaba. Y tercero, ya no era una persona común y corriente; una hellaveniana mas; una terrana que había llegado para destruir ese mundo, como solía decir Luke. No. Ahora soy la princesa de este oscuro lugar. Su ama y señora, a quien le debe respeto y devoción.

— ¿Qué quieres?—, me preguntó con un tono de voz frío, distante, completamente diferente al tono que antes usaba al hablarme. Este era más o menos parecido al que usaba cuando acababa de llegar y nuestra relación era distante y cargada de miedos y presiones.

Yo quise responder que lo quería a él, pero no me atreví porque supuse que tergiversaría el sentido de mis palabras, ¿Cómo podría decirle que quería ver que estaba bien, que quería tenerlo cerca de mí una vez más y que no soportaba la idea de estar lejos de él, sin que empezáramos a discutir? Yo no quería que eso sucediera. No quería gastar los pocos minutos que podía estar con él en una estúpida discusión son sentido, pero necesitaba que él supiera eso. Pero, ¿Cómo se lo diría?

—Vine a verte… Quería saber de ti. — le dije al fin, sintiéndome inconforme con las palabras que salieron de mi boca.

— ¿Y por qué la princesa de este mundo se interesaría en alguien como yo?

Me molestaron sus palabras y al parecer él se dio cuenta porque retrocedió presa del terror que debió provocarle la expresión de mi rostro. Debía suponer que esto pasaría. Debía suponer que él ya no querría saber nada de mi, que me consideraría un monstruo, un ser despreciable que se alimenta de otros y que no es capaz de querer a nadie mas que a los de su especie. Debí suponer que me vería nuevamente como un bicho raro dentro de su perfecto mundo.

Su reacción me dolió porque pensé que, de todas las personas que me conocían, él seria la única que no reaccionaria así. Porque se supone que lo que había pasado entre nosotros había sido demasiado intenso. Porque se supone que el me conocía mejor que nadie en este mundo. Que tonta fui al creer esto.

Ahora tendría que alejarme de él a pesar de que esto me desgarraba por dentro. Tendría que dejar que él fuese feliz a pesar de que eso me hacia infeliz a mi. Tendría que empezar a comportarme como él esperaba que lo hiciera.

—Tienes razón. ¿Por qué habría de interesarme en alguien tan insignificante y patético como tu, si no eres mas que un simple plebeyo del reino? Mi reino— le dije con el corazón cayéndose a pedazos dentro de mi pecho. Después de esto, me di la vuelta rápidamente para salir del lugar, sin siquiera darme tiempo a analizar la mortificada y adolorida expresión de su rostro.

No quería saber que tanto lo había herido porque eso significaría darme cuenta de que tan grave era el hueco que me había quedado en el pecho.
0 Responses

Post a Comment